Las lesiones más habituales en los ciclistas principiantes son las que afectan a la rodilla y a la zona lumbar, ya que se asocian principalmente a una mala biomecánica sobre la bicicleta.
En nuestro cuerpo, por la falta de adaptación a la postura sobre la bicicleta, aparecen determinadas molestias cuando practicamos ciclismo regularmente y con cierta intensidad, tales como molestias musculares, molestias articulares o tendinitis en algunos casos por forzar malas posturas.
Para evitar este tipo de molestias, hay 2 consejos a tener en cuenta:
-Realizar un buen estudio biomecánico para obtener una buena ergonomía sobre la bicicleta. Esto es algo fundamental para evitar cualquier tipo de lesión y poder aumentar el rendimiento.
– Realizar un buen trabajo muscular previo es esencial para que el cuerpo se adapte y evitar así un fallo muscular por descompensación.
Seguir ambas recomendaciones son una de las claves para que tus salidas en bicicleta sean de lo más enriquecedoras y saludables. Además, evitarás ciertas molestias tales como las que se exponen a continuación:
Las lumbalgias casi siempre vienen producidas por falta de tono muscular.También por una mala biomecánica de la bicicleta, lo que nos predispone a sufrir molestias lumbares cuando montamos en ella.
Uno de los aspectos que ocasionan este tipo de molestias suele ser la posición del manillar, demasiado alto o demasiado bajo, que hace que la cadera rote demasiado sobre el sillín.
Cabe comentar que, una vez corregida la posición de la bicicleta, lo más recomendable es fortalecer glúteos, abdominales y la zona lumbar mediante ejercicios específicos para el ciclismo.
Esta es una de las lesiones más comunes del ciclismo. La tendinitis en la pata de ganso provoca la inflamación en la inserción de la rodilla en la cara interna posterior donde se insertan el sartorio, el recto anterior y el semitendinoso.
Cabe detallar que esta lesión se ve más en el ciclismo femenino, ya que las piernas de las deportistas tienen forma de X (genu valgo). Es decir, que, anatómicamente hablando, hay más tendencia a sufrir este tipo de molestias o lesiones.
Para evitar este problema es muy importante controlar el patrón de las piernas en X mediante un completo análisis de la marcha y la pisada. Gracias a dicho estudio, se determina cuál es el grado de apoyo y, si es necesario, con el tratamiento de plantillas personalizadas Podoactiva puede corregirse. También se podrá solucionar, en la medida de lo posible, con la colocación correcta de las calas.
Por otro lado, es importante que el ciclista haga un buen trabajo de piernas para compensar la musculatura inferior y fortalecer, principalmente, los glúteos para buscar una buena estabilidad en las piernas.
Este tipo de lesión se produce, en la mayoría de los casos, por una excesiva tensión en la parte anterior de la rodilla. Generalmente este tipo de molestias suele ser originada por una mala colocación de calas o por una escasa altura del sillín.
Llevar las calas muy adelantadas y el sillín bajo son dos de los factores que causan este tipo de problema, por lo tanto, un ajuste biomecánico es lo más recomendable para solucionarlo.
El adormecimiento de manos o de algún dedo es una de las molestias más frecuentes y que menos importancia se le da. Principalmente, ocurre por llevar el manillar demasiado alejado y el sillín muy retrasado.
La excesiva carga sobre las manos suele ser la que provoca este tipo de adormecimiento en esta parte del cuerpo. En este caso lo recomendable es equilibrar las cargas entre manillar y sillín para repartir los pesos y evitar estas molestias.
En definitiva, como hemos expuesto a lo largo del post, un estudio biomecánico puede solucionar gran parte de los problemas que puede sufrir un ciclista al montar en bicicleta. Corregir estos aspectos hará que disfrutes más de este deporte, mejores el rendimiento y evites posibles lesiones.
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¡Muchas gracias por tu comentario Tabata! Saludos.